Vahema Uncategorized QUEBRADA HONDA

QUEBRADA HONDA

Se desnudo la palabra

en el dolor de la sonrisa

es el valor del efecto

es la conquista del dialecto.

No es tampoco un sueño

la pasion no tiene dueño.

La palabra corre

por las petulantes aguas

de la hermosura.

Me encontre contigo

estaba bañado de sal y de azucar

sobre tu cuerpo abaleado

solo vi luces de esperanza

tu traias sobre los ojos de tu rostro

la dureza de la lucha,

el valor de tu sangre,

la luz de tu coraje,

venias cubierto

con las hojas del otoño.

Las venas de las huellas

nos cubrieron de primavera.

Alto dijo el miedo

y atras quedaban

los cinturones de miseria

La quebrada honda tenia

una sonrisa blanca,

las luces de sus musculos

apoyaban los combates

el trueno y la lluvia

se convirtieron en aliados naturales.

La firmeza de la letra invencible

era la marcha imparable

de los altivos guerreros.

solo pido que me des fuerza

para seguir escribiendo.

vahema

29 noviembre 2011

sucre bolivia.

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DERZU UZALADERZU UZALA

DERSU UZALA

De la penumbra verde y oscura
apareciste como oso vespertino,
tu voz aguda se escuchó
desde la fogata clara
que atizaban los soldados
una noche de plenilunio

Balanceo lateral y encorvado
carga al lomo,
talle pequeño,
mirada felina,
cual puma hambriento,
o cual oso del bosque
buscando en el fuego
el calor de tu hogar perdido
o la carne diaria de la vida

Sentado al borde de la hoguera
atenuaste el cansancio,
tu larga pipa en mano
fue el rito de la reflexión diaria
y una bocanada profunda de humo
fue el eco fugaz
de tu pensamiento

El bosque era tu hogar,
cada paraje era familiar para ti,
los soldados asombrados
no podían creer
la agudeza de tu mirada
ni la percepción profunda
de las huellas
de cada pisada furtiva

Una noche te encontró el capitán
sentado en posición de loto
frente a una hoguera
de seca maleza.
Estabas hablando con tu esposa y tu hijo
y en cada llama azul
sentías el espíritu
de tus seres queridos
o la danza ritual
de amados espectros que acudían
a saludarte,

¡aquella noche de melancolía,
de evocación y de nostalgia!
Goldi grande,
de pequeña estatura,
sabio profundo del bosque,
son tus maestros los arbustos del campo
y también el viento del este,
El “amba” de medianoche,
la nieve,
los riachuelos y los estanques.

Arturo Villena
Primavera 2006